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9 cosas que debes saber sobre el dolor

1. El dolor sale del cerebro. Si bien solíamos creer que el dolor se originaba dentro de los tejidos de nuestro cuerpo, ahora entendemos que el dolor no existe hasta que el cerebro lo determina. El cerebro utiliza un "mapa de ruta" virtual para dirigir una salida de dolor a los tejidos que sospecha que pueden estar en peligro. Este proceso actúa como medio de comunicación entre el cerebro y los tejidos del cuerpo, para servir como defensa ante posibles lesiones o enfermedades.

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2. El grado de lesión no siempre es igual al grado de dolor. La investigación ha demostrado que todos experimentamos dolor de manera individual. Mientras que algunos de nosotros experimentamos lesiones graves con poco dolor, otros experimentan lesiones menores con mucho dolor (piense en un corte de papel).

3. A pesar de lo que nos muestren las imágenes de diagnóstico (resonancias magnéticas, radiografías, tomografías computarizadas), el hallazgo puede no ser la causa de su dolor. Un estudio realizado en personas de 60 años o más que no tenían síntomas de dolor lumbar encontró que 36% tenía una hernia de disco, 21% tenía estenosis espinal y más de 90% tenía un disco degenerado o abultado, según el diagnóstico por imágenes.

4. Los factores psicológicos, como la depresión y la ansiedad, pueden empeorar el dolor. El dolor puede estar influenciado por muchos factores diferentes, como las condiciones psicológicas. Un estudio reciente en el Diario del dolor mostró que las variables psicológicas que existían antes de un reemplazo total de rodilla estaban relacionadas con la experiencia de dolor a largo plazo del paciente después de la operación.

5. Su entorno social puede influir en su percepción del dolor. Muchos pacientes afirman que su dolor aumenta cuando están en el trabajo o en una situación estresante. Los mensajes de dolor pueden generarse cuando un individuo se encuentra en un entorno o situación que el cerebro interpreta como inseguro. Es una forma fundamental de autoprotección.

6. Comprender el dolor a través de la educación puede reducir su necesidad de atención. Un gran estudio realizado con personal militar demostró que quienes recibieron una sesión educativa de 45 minutos sobre el dolor buscaron atención para el dolor lumbar menos que sus contrapartes.

7. Nuestros cerebros pueden ser engañados para que desarrollen dolor en las prótesis. Los estudios han demostrado que nuestros cerebros pueden ser engañados para que desarrollen una sensación "referida" en una extremidad que ha sido amputada, causando una sensación de dolor que parece provenir de la prótesis o de la extremidad "fantasma". La sensación es generada por la asociación de la percepción del cerebro de lo que es el cuerpo desde el nacimiento (íntegro y completo) y lo que es actualmente (post-amputación).

8. La capacidad de distinguir la izquierda de la derecha puede verse alterada cuando experimenta dolor. Las redes dentro del cerebro que lo ayudan a determinar la izquierda de la derecha pueden verse afectadas cuando experimenta un dolor intenso. Si ha estado experimentando dolor y ha notado que su sentido de la dirección está un poco desviado, puede deberse a que un "hoja de ruta" dentro del cerebro que detalla un camino a cada parte del cuerpo puede estar un poco "borroso". (Este es un término que usamos para describir una parte de la hoja de ruta virtual del cerebro que no está clara. Imagine derramar tinta sobre una parte de una hoja de ruta y luego tratar de usar ese mapa para llegar a su destino).

9. No hay forma de saber si tienes una alta tolerancia al dolor o no. La ciencia aún tiene que determinar si todos experimentamos el dolor de la misma manera. Si bien algunas personas afirman tener una "alta tolerancia" al dolor, no existe una forma precisa de medir o comparar la tolerancia al dolor entre las personas. Si bien existen algunas herramientas para medir cuánta fuerza puede resistir antes de experimentar dolor, no se puede determinar cómo se “siente” su dolor.

Leer más sobre Dolor y Síndromes de dolor crónico.

Autor: Joseph Brence, PT, DPT, FAAOMPT, COMT, DAC

Este artículo se publicó originalmente en el sitio web de la Asociación Estadounidense de Terapia Física.  Haga clic aquí para verlo.

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